miércoles, 29 de septiembre de 2010

ponele que esto es terrible

hace un tiempo respondo a soledad solari. casi te diría que depuse armas. esto es grave. gravísimo.

todo julio

tengo miedo de no poder amar nunca. miedo verdadero. no gracioso, miedo que no está bueno.

la casa linda. la ropa linda. las cremas lindas. los zapatos lindos. los collares, los perfumes, los colores, los olores. todo. todo lindo. todo lindo. repitome. todo lindo.

y lindo que me quiera? y lindo que yo quiera? eso cuándo?

lindo como julio. inteligente como julio. alto como julio. menos afrancesado que julio. menos mujeriego. menos mambo negro de escritor que julio. más julio al final. más loco lindo que julio o igual. políticamente activo y consciente como julio. toma mate como julio. fuma menos que julio. le gusta leer a julio. *

todo eso quiero. realmente es tanto pedir?


* por dios. esto es primordial: tiene un nombre más lindo que julio, que, dicho sea de paso, nada me gusta. en julio hace frío. en julio yo la paso mal.

domingo, 26 de septiembre de 2010

capítuo 93

Pero el amor, esa palabra... Moralista Horacio, temeroso de pasiones sin una razón de aguas hondas, desconcertado y arisco en la ciudad donde el amor se llama con todos los nombres de todas las calles, de todas las casas, de todos los pisos, de todas las habitaciones, de todas las camas, de todos los sueños, de todos los olvidos o los recuerdos. Amor mío, no te quiero por vos ni por mí ni por los dos juntos, no te quiero porque la sangre me llame a quererte, te quiero porque no sos mía, porque estás del otro lado, ahí donde me invitás a saltar y no puedo dar el salto, porque en lo más profundo de la posesión no estás en mí, no te alcanzo, no paso de tu cuerpo, de tu risa, hay horas en que me atormenta que me ames (cómo te gusta usar el verbo amar, con qué cursilería lo vas dejando caer sobre los platos y las sábanas y los autobuses), me atormenta tu amor que no me sirve de puente porque un puente no se sostiene de un solo lado, jamás Wright ni Le Corbusier van a hacer un puente sostenido de un solo lado, y no me mires con esos ojos de pájaro, para vos la operación de] amor es tan sencilla, te curarás antes que yo y eso que me querés como yo no te quiero. Claro que te curarás, porque vivís en la salud, después de mí será cualquier otro, eso se cambia como los corpiños. Tan triste oyendo al cínico Horacio que quiere un amor pasaporte, amor pasamontañas, amor llave, amor revólver, amor que le dé los mil ojos de Argos, la ubicuidad, el silencio desde donde la música es posible, la raíz desde donde se podría empezar a tejer una lengua. Y es tonto porque todo eso duerme un poco en vos, no habría más que sumergirte en un vaso de agua como una flor japonesa y poco a poco empezarían a brotar los pétalos coloreados, se hincharían las formas combadas, crecería la hermosura. Dadora de infinito, yo no sé tomar, perdoname. Me estás alcanzando una manzana y yo he dejado los dientes en la mesa de luz. Stop, ya está bien así. También puedo ser grosero, fájate. Pero fijate bien, porque no es gratuito.

¿Por qué stop? Por miedo de empezar las fabricaciones, son tan fáciles. Sacás una idea de ahí, un sentimiento del otro estante, los atás con ayuda de palabras, perras negras, y resulta que te quiero. Total parcial: te quiero. Total general: te amo. Así viven muchos amigos míos, sin hablar de un tío y dos primos, convencidos del amor-que-sienten-por-sus-esposas. De la palabra a los actos, che; en general sin verba no hay res. Lo que mucha gente llama amar consiste en elegir a una mujer y casarse con ella. La eligen, te lo juro, los he visto. Como si se pudiese elegir en el amor, como si no fuera un rayo que te parte los huesos y te deja estaqueado en la mitad del patio. Vos dirás que la eligen porque-la-aman, yo creo que es al verse. A Beatriz no se la elige, a Julieta no se la elige. Vos no elegís la lluvia que te va a calar hasta los huesos cuando salís de un concierto. Pero estoy solo en mi pieza, caigo en artilugios de escriba, las perras negras se vengan cómo pueden, me mordisquean desde abajo de la mesa. ¿Se dice abajo o debajo? Lo mismo te muerden. ¿Por qué, por qué, pourquoi, why, warum, perchè este horror a las perras negras? Miralas ahí en ese poema de Nashe, convertidas en abejas. Y ahí, en dos versos de Octavio Paz, muslos del sol, recintos del verano. Pero un mismo cuerpo de mujer es María y la Brinvilliers, los ojos que se nublan mirando un bello ocaso son la misma óptica que se regala con los retorcimientos de un ahorcado. Tengo miedo de ese proxenetismo, de tinta y de voces, mar de lenguas lamiendo el culo del mundo. Miel y leche hay debajo de tu lengua... Sí, pero también está dicho que las moscas muertas hacen heder el perfume del perfumista. En guerra con la palabra, en guerra, todo lo que sea necesario aunque haya que renunciar a la inteligencia, quedarse en el mero pedido de papas fritas y los telegramas Reuter, en las cartas de mi noble hermano y los diálogos del cine. Curioso, muy curioso que Puttenham sintiera las palabras como si fueran objetos, y hasta criaturas con vida propia. También a mí, a veces, me parece estar engendrando ríos de hormigas feroces que se comerán el mundo. Ah, si en el silencio empollara el Roc... Logos, faute éclatante. Concebir una raza que se expresara por el dibujo, la danza, el macramé o una mímica abstracta. ¿Evitarían las connotaciones, raíz del engaño? Honneur des hommes, etc. Sí, pero un honor que se deshonra a cada frase, como un burdel de vírgenes si la cosa fuera posible.

Del amor a la filología, estás lucido, Horacio. La culpa la tiene Morelli que te obsesiona, su insensata tentativa te hace entrever una vuelta al paraíso perdido, pobre preadamita de snack-bar, de edad de oro envuelta en celofán. This is a plastic's age, man, a plastic's age. Olvidate de la perras. Rajá, jauría, tenemos que pensar, lo que se llama pensar, es decir sentir, situarse y confrontarse antes de permitir el paso de la más pequeña oración principal o subordinada. París es un centro, entendés, un mandala que hay que recorrer sin dialéctica, un laberinto donde las fórmulas pragmáticas no sirven más que para perderse. Entonces un cogito que sea como respirar París, entrar en él dejándolo entrar, neuma y no logos. Argentino compadrón, desembarcando con la suficiencia de una cultura de tres por cinco, entendido en todo, al día en todo, con un buen gusto aceptable, la historia de la raza humana bien sabida, los períodos artísticos, el románico y el gótico, las corrientes filosóficas, las tensiones políticas, la Shell Mex, la acción y la reflexión, el compromiso y la libertad, Piero della Francesca y Anton Weber, la tecnología bien catalogada, Lettera 22, Fiat 1600, Juan XXIII. Qué bien, qué bien. Era una pequeña librería de la rue du Cherche-Midi, era un aire suave de pausados giros, era la tarde y la hora, era del año la estación florida, era el Verbo (en el principio), era un hombre que se creía un hombre. Qué burrada infinita, madre mía. Y ella salió de la librería (recién ahora me doy cuenta de que era como una metáfora, ella saliendo nada menos que de una librería) y cambiamos dos palabras y nos fuimos a tomar una copa de pelure d'oignon a un café de Sèvres-Babylone (hablando de metáforas, yo delicada porcelana recién desembarcada, HANDLE WITH CARE, y ella Babilonia, raíz de tiempo, cosa anterior, primeval being, terror y delicia de los comienzos, romanticismo de Atala pero con un tigre auténtico esperando detrás del árbol). Y así Sèvres se fue con Babylone a tomar un vaso de pelure d'oignon, nos mirábamos y yo creo que ya empezábamos a deseamos (pero eso fue más tarde, en la rue Réaumur) y sobrevino un diálogo memorable, absolutamente recubierto de malentendidos, de desajustes que se resolvían en vagos silencios, hasta que las manos empezaron a tallar, era dulce acariciarse las manos mirándose y sonriendo, encendíamos los Gauloises el uno en el pucho del otro, nos frotábamos con los ojos, estábamos tan de acuerdo en todo que era una vergüenza, París danzaba afuera esperándonos, apenas habíamos desembarcado, apenas vivíamos, todo estaba ahí sin nombre y sin historia (sobre todo para Babylone, y el pobre Sèvres hacía un enorme esfuerzo, fascinado por esa manera Babylone de mirar lo gótico sin ponerle etiquetas, de andar por las orillas del río sin ver remontar los drakens normandos). Al despedirnos éramos como dos chicos que se han hecho estrepitosamente amigos en una fiesta de cumpleaños y se siguen mirando mientras los padres los tiran de la mano y los arrastran, y es un dolor dulce y una esperanza, y se sabe que uno se llama Tony y la otra Lulú, y basta para que el corazón sea como una frutilla, y...

Horacio, Horacio.

Merde, alors. ¿Por qué no? Hablo de entonces, de Sèvres-Babylone, no de este balance elegíaco en que ya sabemos que el juego está jugado.




por dios. cómo no amarlo?

en serio?

vos decís que mi vecino, reciente padre primerizo, esté tan pero tan bueno?

cagada por un elefante de un decimocuarto piso...

viernes, 24 de septiembre de 2010

los ganchos de la cortina de la ducha estaban en una caja de zapatos.

anda a saber por qué, cómo y cuándo llegaron ahí...

vete

miércoles, 22 de septiembre de 2010

lu corti

lu corti era una compañera del secundario.
lu corti tenía su nombre pegado, cosido, incrustado en cada elemento que le pertenecía.
lu corti poseía una tijera que tenía su nombre en una cinta que estaba cosida alrededor de uno de los mangos.
lu corti usaba aparatos en el primario. los llevaba colgados. se lavaba los dientes en el baño del colegio.
lu corti era meticulosa.
lu corti tenía pelo largo. colita o trenza. nunca suelto. nunca despeinada.
lu corti era una niña mañosa para tan corta edad.
lu corti siempre te hacía sentir mal al tocar sus cosas.
nunca se era tan cuidadosa como lu corti.

lu corti:

muchos años han pasado. en tu honor voy a rememorarte todos y cada uno de los días que alguien visite mi nuevo hogar. voy a sufrir el contacto de ellos con mis cositas. ellos lo van a saber. aquellas que te conocieron se refieren a mí como lu corti. espero este humilde homenaje te sea feliz. nosotras somos mónica de friends y a mucha honra, admitamoslo lu corti.

tercer noche de convivencia

me mudé. lo logré. mirá si se hizo parir este hijo de mil puta. pero si lo vieras. aún con todo lo todisimo lo que le falta, es divino.
y sus sillones.
y sus tapitas de luz.
y el baúl oxidado, que no da tanto como daba esa tarde en el mercado de pulgas... pero así todo divino.
y su cuadro que hizo ciro y está tan acordemente cromatizado con el resto del ambiente.
y me compré unas plantas a las que les hablo. jajaja estoy re loca mal.
y tengo el mejor tutor del mundo*.
y todo sale bien.
y todo lindo.
salvo que no encuentro los ganchos de la cortina del baño y se moja todo y no está bueno buenos aires.





*ver otras personas no está tan mal pablo, creeme...

martes, 14 de septiembre de 2010

la necedad ajena me violenta.

declaración de guerra.

hija de mil puta. te voy a cobrar todas y cada una de las lágrimas que me hiciste derramar. te voy a cobrar la impotencia que me hiciste sentir hoy.

terrorismo

cuáles son las chances de que yo busque a mi primer novio por primera vez en mi vida en el facebook el domingo a la noche, lo encuentre, vea sus fotos, tenga escalofríos y terror verdadero y el me mande un mail hoy que lee:

que bizarro encontrarte acá.

qué terror por dios que te dirijas a mí. dejá de hacerlo.

¿el sabe que yo lo busqué?

domingo, 12 de septiembre de 2010

citas citables

es una tontería no perseguir en la vida lo más alto que uno pueda imaginar, incluso a riesgo de perderlo todo. porque si uno no lo persigue lo perderá de todos modos.

francis ford coppolla

de ironías

cuando mi madre me nomencló quiso condenarme al éxito.

se sabe.

me gusta contradecirla.

jueves, 9 de septiembre de 2010

capítulo 23

En la esquina de la rue Tournefort, Oliveira se dio cuenta de que llevaba todavía el cigarrillo entre los dedos, apagado por la lluvia y medio deshecho. Apoyándose contra un farol, levantó la cara y dejó que la lluvia lo empapara del todo. Así nadie podría darse cuenta, con la cara cubierta de agua nadie podría darse cuenta. Después se puso a caminar despacio, agachado, con el cuello de la canadiense abotonado contra el mentón; como siempre, la piel del cuello olía horrendamente a podrido, a curtiembre. No pensaba en nada, se sentía caminar como si hubiera estado mirando un gran perro negro bajo la lluvia, algo de patas pesadas, de lanas colgantes y apelmazadas moviéndose bajo la lluvia. De cuando en cuando levantaba la mano y se la pasaba por la cara, pero al final dejó que le lloviera, a veces sacaba el labio y bebía algo salado que le corría por la piel. Cuando, mucho más tarde y cerca del jardín des Plantes, volvió a la memoria del día, a un recuento aplicado y minucioso de todos los minutos de ese día, se dijo que al fin y al cabo no había sido tan idiota sentirse contento mientras acompañaba a la vieja a su casa. Pero como de costumbre había pagado por ese contento insensato. Ahora empezaría a reprochárselo, a desmontarlo poco a poco hasta que no quedara más que lo de siempre, un agujero donde soplaba el tiempo, un continuo impreciso sin bordes definidos. "No hagamos literatura", pensó buscando un cigarrillo después de secarse un poco las manos con el calor de los bolsillos del pantalón. "No saquemos a relucir las perras palabras, las proxenetas relucientes. Pasó así y se acabó. Berthe Trépat... Es demasiado idiota, pero hubiera sido tan bueno subir a beber una copa con ella y con Valentín, sacarse los zapatos al lado del fuego. En realidad por lo único que yo estaba contento era por eso, por la idea de sacarme los zapatos y que se me secaran las medias. Te falló, pibe, qué le vas a hacer. Dejemos las cosas así, hay que irse a dormir. No había ninguna otra razón, no podía haber otra razón. Si me dejo llevar soy capaz de volverme a la pieza y pasarme la noche haciendo de enfermero del chico." De donde estaba a la rue du Sommerard había para veinte minutos bajo el agua, lo mejor era meterse en el primer hotel y dormir. Empezaron a fallarle los fósforos uno tras otro. Era para reírse.

capítulo 7

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.

Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

lunes, 6 de septiembre de 2010

buongiorno amici

no sabés la elegancia con la que salto el molinete de retiro cada mañana.

cual gacela me acerco, apoyo mano derecha primero, mano izquierda después; me imagino que estoy por ser puntuada por mi destreza, agilidad y gracia mientras pego ese salto. aterrizo del otro lado y camino en dirección al reloj mientras escucho esos apalusos imaginarios y veo al jurado con sus 9.9, 9.8 y 7.8 (porque siempre hay un ortiva).

que buen humor que tengo hoy por diorrrr.

domingo, 5 de septiembre de 2010

libertad. mal. libertad mental. libertad de ser. de no ser. de todo. felicidad.

feliz antidomingo

antidomingo

tiene miedo. miedo a que no funcione. a que si no funciona. pero he ahí el punto. su temor no es que no funcione conmigo, sino sólo que no funcione. y ahí nomás se develo el misterio. es un mediocre.

un cagón y un mediocre ya sería demasiado...

viernes, 3 de septiembre de 2010

a ficar mi amor

a mi me cagó un mamut de un decimotercer piso.

mañana me mudaba. mañana sacaba mi vida de esas cajas en la que está frenada hace más de dos meses. mañana limpiaba. mañana me mudaba. y no me mudo un carajo. por que aparentemente mi destino es quedarla con mama y papa. dar la vuelta al perro. y la puta madre me quiero mudar y llorar todo junto.

sólo faltaba poner la mesada y conectar la bacha tan linda que me compre. la mesada tendría que haber sido colocada el 17 de agosto, esa había sido la fecha pautada en julio. hoy 3 de septiembre fueron a colocarla. todavía no sé cómo porque mi papa me dijo que no vaya al departamento (mientras escuchaba los gritos de mi adorable madre de fondo) pero aparentemente la mesada se rompió. la quedé. mal.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

de turcos

cuenta la anécdota que el turco le decía:

- i make the sex.

el jipi es puto

yo quiero un marido intelectual. que sepa de hegel, de marx, de agamben, de borges, de julio, de todos esos otros que yo todavía ni se. pero admitámoslo, el intelectual bordea lo jipi.

y yo al jipi no lo quiero, al menos no quiero el jipi con esa babucha de rayas que no debería ser vista públicamente por nadie. yo quiero un jipi que se vista de bolivia (la marca, no el país) y estoy empezando a aceptar que ese jipi no existe...

perro que ladra no muerde...

viernes. bar. marida. potencial papa ahí. es lindo, tiene barba y ojitos. ella lo desaprueba. él está a mis espaldas. yo no lo puedo creer. ¿cuál es el problema?

- demasiada atención reclama. es el centro de atención. no me gustan así. los prefiero calladitos.

- sí, a mi también me gustan más discretos, pero...

- ¿?

- el calladito con los amigos es un hijo de puta con la minusa. el gritón con los amigos es una nena con la mujer. en realidad habría que preferirlo así. que se haga el pija con los amigos y que a mi no se me venga a hacer el macho de américa.

- gran verdad.

ebrias brindamos.

26 de agosto

el 26 de agosto mi novio julio hubiese cumplido años. y yo se lo festeje.

salte, bebí y baile por él. brindé por él sin avisar. le sonreí sólo a él.

la gran leo

recibo un sms que dice:

cuando te mudes y necesites personal de mantenimiento no te olvides del carpintero, jaja.

mi hermana dice que es kármico. aparentemente que yo haya invitado a tomar algo a ese ex futuro marido mio habilito al cosmos (y al carpintero) a enviarlo.

gracias Dante por recordarme a Borges

El amenazado.

Es el amor. Tendré que ocultarme o que huir.

Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz. La hermosa
máscara ha cambiado, pero como siempre es la única. ¿De que me servirán
mis talismanes: el ejercicio de las letras, la vaga erudición, el
aprendizaje de las palabras que uso, el áspero Norte para cantar sus
mares y sus espadas, la serena amistad, las galerías de la Biblioteca,
las cosas comunes, los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra
militar de mis muertos, la noche intemporal, el sabor del sueño?

Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo.

Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se levanta
a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por las ventanas,
pero la sombra no ha traído la paz.

Es, ya lo se, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la
espera y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.

Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas magias inútiles.

Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.

Ya los ejércitos me cercan, las hordas.
(Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)

El nombre de una mujer me delata.

Me duele una mujer en todo el cuerpo.